Hola todos, es la primera entrada que os escribo con 21 años. Sentiros importantes ;).
Seguro que os preguntaréis si mi día fue tan malo como me lo planteaba a las 23.56 del día anterior. Pues no fue malo...fue distinto, raro y bueno. ¿A qué me refiero? Se me hizo raro, era un día especial...sí lo notaba como tal...pero...no estaba la gente de siempre a mi lado...me encontraba con gente nueva y mi habitación, como dije, no se abrió de par en par a las 00.00, ni por la mañana me atacó un gato...
Sin embargo, por otro lado, hubo muchas sorpresas. Para empezar en el hospital mi "segunda mentora" se acordó que era mi cumple y me preparó unos muffins con manzana y canela. La verdad que no me esperaba nada de esto, pensaba que se iba a olvidar pero cuando nada más verme me dijo: "Felicidades" fue como... O.o. Así que el día en el hospital fue tranquilito...me pusieron una banderita y cada vez que alguien la veía preguntaban el motivo y me felicitaban.
A pesar de todo esto, mi idea era según llegara a casa meterme en la habitación y ponerme a leer o ver series hasta las 18.30 que tenía aikido. No iba a subir ni a comer a casa de María. Así que entré en casa. después de mirar el buzón por si acaso, "silenciosamente" y me fui dirección a mi habitación raudo para que Antonio no me viera. Pero no todo sale como uno piensa, es más, últimamente cambian demasiado mis planes.
En el salón estaban Antonio y María esperándome con 21 velas y con un bizcocho. La verdad que me pegué un susto no me esperaba encontrar a nadie en esas condiciones je,je. Fue bonito pero no supe demostrarlo la verdad que me quedé a cuadros y me hizo mucha ilusión pero no me salían las palabras. María bajó a comer y me había preparado judías con chorizo ^^, estaban muy ricas. Terminamos de comer y María subió a su casa y yo me encerré en la habitación.
Como era de esperar, comenzaban las llamadas. Me llamó Ana Marí y mientras hablaba con ella aparecieron Albert y Tato que venían a verme. Éstos venían con una tarta para mí pero se les había apagado la vela. No pasa nada, os perdono ajjajaja. La verdad que no esperaba que vinieran a verme y me hizo muchísima ilusión. Estuvimos hablando y Nacho observó que también mis Playmobil estaban celebrando mi cumpleaños je,je (ya os contaré la historia de los patos y los Playmobil)
Ellos se fueron a las 18.30, aunque parecían las 22.00 por la luz que había, y yo quería ir a aikido pero al final me quedé en casa. Hice bien porque me llamaron los de la uni (Álvaro y Cristina, más tarde se unieron Miguel Ángel, Elena y Raquel) estuvimos bastante tiempo hablando casi hasta las 21.00 pero fue un buen recuerdo. También me llamaron mis padres, mi abuela, me felicitó Nala, me llamaron mis abuelos, mis tíos y Laura de Morata ^^, una amiga que hacía mucho que no hablaba con ella.
Tuve muchas felicitaciones, no me puedo quejar. Una "carta" de Laura que llegó a horas californianas :p, un vídeo muy chulo de parte de los de la parroquia y mensajes de gente que sabía que no iba a faltar en este día, fuera por sms, whatsapp o twitter.
Lo último que he recibido fue una cena ayer por parte de Albert, la verdad que me quedé hinchadisimo, y dos regalos de Tolia: un Grifo, que es uno de los monumentos de San Petersburgo, y también una botella de Vodka.
Así a pesar de que fue un día raro puedo decir que comencé los 21 con buen pie. Aunque no lo supiera demostrar y alguno acabaran de mí hasta las narices.
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